2/8/11

Tierra de Libertad... y represión


Este post se iba a llamar "El sueño (compartido) de la casa propia", pero bueno. Me gustan más los títulos cortos. Me parecen más contundentes. Porque esta breve reflexión habla de eso: de la (ausencia de) libertad ante a la ausencia de tierras para habitar.
Porque la semana pasada en el Ingenio Ledesma, en Jujuy, se reabrió la herida más grande que tiene hoy, y desde hace años, la Argentina: la crisis estructural de la vivienda propia. Los qom, el Parque Indoamericano, están a la vuelta de la esquina. Y Santiago, y Córdoba, y Rosario. El derecho a la vivienda propia. O, en los centros urbanos, el "derecho a la ciudad", parafraseando a Henri Lefebvre.
"En Jujuy, si no estás con la Tupac Amaru de Milagros Sala, no recibís ni bolsones ni planes ni vivienda". Palabras de un militante de la CCC al diario Perfil.
Ahora cambien "ayer" por "los 90"; "Jujuy", por "Buenos Aires"; "Milagros Sala", por "manzaneras"; y CFK, por Duhalde. Y van a ver que el resultado es el mismo: la misma matriz clientelar peronista de concebir la política y los derechos sociales y económicos.
Con un agravante que no podemos soslayar:
exceptuando el asesinato del militante del PO Mariano Ferreyra, todas las muertes posteriores, desde Lugano a Retiro, desde Formosa a Jujuy, tuvieron como eje principal el reclamo o directamente la toma de tierras para viviendas por parte de colectivos sociales olvidados por "el modelo". Es el detalle que omitió señalar el artículo del domingo de Clarín sobre las 14 muertes por la represión de la protesta social en el último año.


Ninguno de esos reclamos tuvieron eco en el poder federal, que se enorgullece de haber hecho la mayor candidad de viviendas desde la vuelta de la democracia. Lo que hay de "mayor" desde 1983, en realidad, es una crisis habitacional sin parangón, que no ha sido abordada en toda su extensión por el poder central de turno. Ni hablar de la ausencia de transparencia en las obras que se adjudicaron a ONGs que nada tienen que ver con la construcción de hábitat para la vivienda como "Sueños compartidos", regenteada por Hebe de Bonafini y, hasta ayer nomás, su mano derecha Sergio Schoklender.


Véase por caso el "ejemplo Lugano", en el que tienen responsabilidades compartidas Nación y Ciudad: la misma tarde-noche en que hubo 4 muertos por toma de tierras sin uso, la Presidenta de la Nación salió a informar por cadena nacional... ¿la creación de un ministerio federal de la vivienda? No: un ministerio de Seguridad. Más claro, para ver el enfoque sesgado, cortoplacista y electoral, con que se encara el tema de la vivienda en el nivel nacional, agua.
No quiero abrumar con datos. En este post de 2010 he escrito más detenidamente sobre los distintos aspectos de la problemática habitacional en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La pregunta sigue siendo: ¿para cuándo el Ministerio de Urbanismo y Vivienda Federal?
En síntesis, los trágicos hechos de la semana pasada nos muestran claramente, una vez más, que el Estado se hace "presente", como diría el sociólogo francés Loïc Wacquant -uno de los tantos intelectuales que el ex periodista Horacio "Bombita Rodríguez" Verbitsky solía citar en los noventa y que hoy prefiere no mentar-, de manera selectiva: no para atender las necesidades de aquellos que ha olvidado el mercado, sino para reprimirlos.
Y, como siempre en los últimos años, ante cada nueva represión de la protesta social, el relato oficial calla. Las que hablan... son las balas.

2 comentarios:

  1. Estimado: Oportuna nota. Acuerdo que, el episodio de Jujuy, como los otros que cita en su nota, evidencia un -el- problema de la vivienda urbana y rural. Pero además exhibe un dilema muy especifico: el avance de la tierra (de esas grandes tierras de viejos dueños) vs la explosión demográfica. Dilema que, en algún momento ya había plantado Foucault: ¿Dónde meter a la gente?. Es precisamente ese Estado no ausente sino presente pero cómplice el que debe tomar posición, sea a través de sus órganos colegiados; sea por medio del empoderamiento social. ¡Saludos!

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  2. Estimado:
    En las ciudades pasa lo mismo que en el campo, las propiedades se cotizan en dólares mientras los salarios están en pesos, esa diferencia empezó en 1975 con el Rodrigazo cuando ya fue evidente que la moneda nacional podía desaparecer de un día a otro,... se convirtió la propiedad en un lugar de especulación y concentración de capital rentista para la clase dirigente, nadie hace nada por este tema porque los que mandan tienen detrás de testaferros miles de propiedades, todos conocemos a alguien que con diez deptos ya vive sin laburar, hay gente que tiene docenas...ahorrar en ladrillos es su lema, y ni hablar de la burbuja especulativa manejada en las ciudades por los grandes estudios más las grandes inmobiliarias ... una curiosidad, la famosa y aún temida Ley de Alquileres la puso un milico golpista del 43, el Gral Pedro P. Ramírez, había un coronel Perón que le soplaba al oído...
    Atte/

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